La Mesa de la Trinidad

    Aquel Lunes Santo cambió muchas cosas. No sólo lo hizo en mí. Lo hizo en cada uno de los que, años atrás decidieron formar parte de esta manera de entender lo que es sacar un trono. De gente que mucho antes de que a mí se me pasara por la cabeza, ya llevaban grabada, como a fuego, la idea de hacer que Ella ocupara el lugar de Reina que se merece en ese trocito del Barrio de la Trinidad que se llama Málaga.